viernes, 5 de octubre de 2007

Párate un tiempo

Algunos de nosotros vivimos de manera acelerada. Las prisas son nuestras grandes y inseparables compañeras. Tanto es así, que a veces nos acostumbramos a esos malos hábitos de la vida y sufrimos cuando eso cambia. Había olvidado lo que era no tener que correr y me cuesta horrores disfrutar de los pequeños placeres de la vida. Los semáforos rojos son aquellos elementos del mobiliario urbano que tanto detesto, porque aunque yo quisiera seguir, me obligan a pararme, aunque sólo sea unos segundos. ¿Porqué debo parar si lo que yo quisiera es continuar? Sencillamente, porque hay cosas que no dependen de nosotros.
Estos son algunos de los semáforos que encuentro de camino a mi curro. Las fotos son todas del miércoles. Evidentemente sólo fotografié los rojos (y no todos), porque con los verdes ni me paro.

Semáforo con añadido de 'prohibido girar a la izquierda'


Qué luminosidad!

Este es uno de mis preferidos, que además siempre pillo en rojo. A dos alturas, y no entiendo el porqué, con su flecha que indica que sólo es aplicable a los que giren a la izquierda.


Esa calle es donde yo iba al insti en COU.




¿Qué le pasa al semáforo que parece una manzana?


Es la segunda vez que fotografío desde este punto. No sólo es que me guste, sino que cada mañana los pillo en rojo. Además es uno de esos semáforos de larga duración para nosotros que bajamos. Y doble ración!



Podría ser cualquiera de esas motos, pero esta vez no me cuelo, que sino no pillo el semáforo.



Aquí es en la única calle que giro a la derecha.

Y los auténticos protagonistas, los que hicieron que me animara a hacer este monográfico de semáforos....Están en el barrio de Gracia y no están ellos dos solos. Y es que, que te obliguen a pararte no siempre es agradable, por eso, porque a veces en esa pausa pueden pasar muchas cosas por nuestra cabeza, siempre es mejor que te lo digan de otro modo, con el corazón, intentando conseguir arrancarnos una sonrisa. A ver, que está claro, que el semáforo dura exactamente lo mismo que los otros, pero yo lo veo distinto....


Y si lo que hacemos es acatar órdenes, nadie mejor que los Transportes Hernández y Sanjurjo con su 'Sentadito y callao'. Me encantó esta canción desde la primera vez que la escuché. Gracias por presentarme a esta gente, Paco.